A estas alturas hay poca información que os podamos explicar sobre los chip de Nvidia y el rendimiento de su 2080 que ya no conozcáis. Sin embargo, es posible que dado el presente y futuro de Nvidia más de uno esté planteándose cambiar su 1080 por una 2080 (ninguna en versiones TI).
A nosotros nos ha pasado y por eso os hemos querido preparar esta comparativa de la mano de Gigabyte donde veremos si saltar de la Aorus 1080 a la Gigabyte 2080 es un cambio notable.
Entendemos que si te estás planteando este cambios es porque dispones de un monitor gaming de mayor tamaño o/y mayor resolución.
Unboxing
Sin entrar en demasiados detalles, puesto que esto será más una comparativa de rendimiento, en un primer vistazo vemos que la 2080 de Gigabyte es más básica en diseño.
Tened en cuenta que Gigabyte tiene su línea más gaming para la línea comercial Aorus por lo que aquí en este sentido es claramente inferior.
La parte de disipador y apariencia exterior pudiera dar la impresión que está peor preparada que la Aorus 1080 sin embargo en nuestras pruebas ambas gráficas alcanzaron la misma temperatura máxima de 71º.
Pruebas 2080 vs 1080 a 4k
La instalación es sencilla y la 2080 a diferencia de la Aorus 1080 cuenta con menos puertos de alimentación.
Las pruebas las hemos pasado a la máxima, en este caso usando un monitor 4k. Hay un par de benchmarks que los hemos pasado a 1080 puesto que no nos dejaba más resolución (son más antiguos).
El rendimiento con las Oculus Rift en juegos en entorno virtual es muy similar puesto que la 1080 sigue siendo una buena tarjeta gráfica para poder disfrutar de juegos a 90fps sin problema.
Conclusiones
Como podéis ver en los análisis en las pruebas sintéticas notamos una mejora de media del 23%. En algunos juegos que hemos probado como The evil within 2 en 4k con la 2080 sí que hemos notado una mejora notable pasando de una media de 30fps a 50fps.
Si estáis pensando en cambiar de la 1080 a la 2080 sólo lo recomendamos si tenéis pensado jugar mínimo a resoluciones de 2k.
También la 2080 cuenta con una tecnología más prometedora a la cual aún no se le está sacando todo su rendimiento y la actualización de este año con sus versiones «super» (con poco cambio en rendimiento), hace que la 2080 estándar esté a un mejor precio.
